INTERPRETACIÓN ONÍRICA

El sueño es un estado alterado de consciencia cuando dormimos hay más actividad cerebral que cuando estamos despiertos, el sueño sigue un ciclo regular todas las noches, las ondas cerebrales siguen patrones predecibles y actúan según las etapas del sueño. Es sabido por las investigaciones en neurobiología que en la fase del sueño el cortex prefrontal del cerebro, que es donde se asienta nuestro pensamiento racional está prácticamente desconectado.La interpretación onírica desde el punto de vista psicoanalítico se basa en que los sueños son el producto de la actividad de la censura sobre los contenidos inconscientes displacenteros que tratan de manifestarse durante la fase de sueño cuando el centro de la lógica está apagado.

Toda representación onírica es un intento generalmente de realización de deseos, pero como éstos chocan frecuentemente con nuestros principios morales se produce una deformación en el contenido para evitarnos la angustia.

Esto no se aplica a los sueños de la neurosis traumática, debido a que cuando una persona ha sufrido un choque psíquico intenso sus sueños son una reproducción literal de las sensaciones desagradables experimentadas en el momento del trauma. Hay autores que opinan que incluso la satisfacción intensa de deseos en los sueños encubre situaciones desagradables a los que el sujeto se encuentra sometido y que forman la verdadera base del sueño.

En todo sueño aparece un contenido manifiesto que es lo que la persona recuerda haber soñado, generalmente este contenido aparece tan disfrazado por la censura que no se experimenta angustia alguna, salvo en los casos en que el contenido sea tan intenso que la censura no logre deformarlo lo suficiente. El contenido latente es el aspecto más profundo del sueño al que intenta llegar la interpretación psicoanalítica. C. G. Jung considera que en el sueño aparecen representados no sólo los contenidos de los conflictos personales, sino también, las manifestaciones del inconsciente colectivo.