El cambio requiere siempre enfrentarnos a lo nuevo, nuestro organismo gasta mucha energía en mantenernos a salvo y seguros, incluso de nuestros propios conflictos internos, generados en diferentes instancias de nuestra mente, por lo tanto aunque sea algo deseado, el cambio siempre genera incertidumbre y esto no le gusta a nuestra psíque que intentará defe