VIVIR SIN ANSIEDAD

Nacemos a esta realidad como seres totalmente dependientes, solos no tenemos ninguna posibilidad de sobrevivir, necesitamos el cariño y el cuidado para conseguir afianzar nuestra frágil naturaleza, es cuando recibimos el afecto necesario que podemos crecer. Esta condición de supeditación vital genera nuestro primer miedo biológico racional, necesitamos el vínculo para no perecer, este temor visceral queda insertado en nuestro psiquismo desde los niveles más profundos, un sentimiento difuso que puede transformarse en ansiedad a medida que vamos avanzando en nuestro ciclo vital. Sentimos que algo pasa en nuestro sistema pero no podemos identificarlo, este temor a lo desconocido se manifestará y desestabilizará nuestras vidas llegando incluso a provocar síntomas psicosomáticos.

La ansiedad nos advierte de que existen conflictos no resueltos que han quedado reprimidos en la parte inconsciente de nuestro psiquismo y si no le prestamos atención puede transformarse en depresión. 

Trabajar analíticamente con los síntomas de ansiedad en terapia genera muchas resistencias, hemos vivido toda nuestra vida con el traje de la neurosis y la angustia, nos resistimos a despojarnos de él, son nuestras defensas con las que hemos logrado sobrevivir. Enfrentarnos a una verdad desnuda que desconocemos nos aterra, debajo de las resistencias encontramos el dolor reprimido que puede surgir a la superficie de nuestra consciencia, debemos aprender a conectar con lo que hay detrás de nuestras creencias, la mayoría adquiridas de una forma casi inconsciente mientras crecíamos, al examinarlas estamos amenazando la integridad de su estructura y se resisten a perecer.

En ocasiones este miedo instintivo e inconsciente se manifestará a través de fobias que sirven para focalizar este temor en un solo punto, es decir lo proyectamos sobre algo concreto y conocido, pero la ansiedad no solo nos genera perturbaciones, también nos ayuda a subsistir en entornos estresantes y nos advierte de los peligros que tenemos que desafiar. Nuestra psique esta programada para trabajar con este signo de alarma, que se estableció para nuestra supervivencia, pero a nivel consciente no sabemos como manejar el miedo que esta en la base de nuestra ansiedad, no sabemos como controlarlo y desactivarlo a voluntad, esto nos desestabiliza, y el mismo acto de evitación, consigue que la ansiedad se dispare a niveles ingobernables.

Entender nuestros miedos y su origen nos dota de una herramienta eficaz para poder enfrentarlos y controlarlos, no hay nada más aterrador que la sombra engrandecida de nuestro propio desconocimiento.